¿Qué es el Club RePro?

RePro es una propuesta innovadora dirigida a niños y niñas que aman los números y los desafíos lógicos. El Club RePro ofrece un espacio dinámico para desarrollar habilidades en resolución de problemas y pensamiento lógico matemático.

¿A quiénes va dirigido?

Está dirigido a niños y niñas del 1° al 6° grado de primaria.

¿Cómo se trabaja en el espacio?

El Club Re Pro promueve el pensamiento lógico y la habilidad de resolución de problemas no rutinarios de sus participantes mediante una metodología activa. Para ello, utilizamos el proceso de resolución de problemas propuesto por G. Polya, así como metodologías para la activación del pensamiento matemático desarrolladas por el Centro de Modelamiento Matemático de la Universidad de Chile. Además, trabajamos con andamiajes para que nuestros participantes alcancen la zona de desarrollo próximo propuesta por Vigotsky.

Metodología.

  • Desafío de resolución de problemas no rutinarios.

Los participantes se enfrentan constantemente a situaciones de incertidumbre, para las cuales existen diversas posibilidades de resolución.

Esto moviliza su curiosidad y les da espacio para utilizar todo tipo de estrategias.

Ninguno de los problemas presentados tiene una solución predeterminada.

  • Trabajo en equipo.

Cada día se organizan grupos de tres o cuatro estudiantes seleccionados al azar para el trabajo colaborativo. La rotación que aporta la formación de grupos al azar trae muchos beneficios a la dinámica de la actividad y la convivencia del club. Esto permite que los participantes se enfoquen en la tarea a realizar y tomen roles distintos a los que desempeñan en su cotidianidad. Esta forma de trabajo exige flexibilidad y capacidad de adaptación, ya que, en cada grupo, se otorga un rol diferente para cada integrante, valorando lo que cada uno aporta a la resolución de un problema colectivo.

 

  • Trabajo colaborativo.

Los participantes construyen en conjunto un conocimiento común que les permite llegar al objetivo planteado. Cada participante pone a disposición del grupo sus conocimientos, experiencias, perspectivas y habilidades para llevar a cabo la tarea a través de una interacción constante. Esta forma de trabajo permite que los aportes de los participantes se maximicen al ser articulados con los de sus compañeros, facilitando que todos puedan llegar más lejos de lo que llegarían si trabajaran solos.

  • Orientación e instrucción diferenciada.

En cada sesión se brindan oportunidades para que todos puedan avanzar a su propio ritmo.

Para esto, cada actividad se planifica con variabilidad, para que puedan usarse según las necesidades y ritmos de los estudiantes. Por ejemplo, si hay dificultades para avanzar, se les propone una simplificación, para que la tarea esté al alcance de los estudiantes y los oriente a encontrar caminos de resolución. Del mismo modo, si los estudiantes han completado y comprendido la tarea, se les puede proponer una extensión, es decir, una nueva tarea que los desafíe y les permita profundizar y continuar desarrollando sus habilidades.

  • Comunicación y argumentación en plenarias.

Al finalizar la resolución de un problema, los participantes viven una instancia dónde comparten e intercambian ideas, razonamientos, emociones, conclusiones y/o argumentos con sus compañeros de sesión, formando una comunidad de discusión. Esto promueve la expresión oral y la escucha activa, lo que da oportunidades a cada uno de ellos de dialogar, opinar y valorar las ideas compartidas. El uso sistemático de las plenarias contribuye al desarrollo de la identidad, la autoestima y la autoeficacia de los integrantes del club.

Proceso de resolución de problemas matemáticos de Polya

Los pasos de Polya son una herramienta muy útil para la resolución de problemas matemáticos y son aplicables a muchos otros entornos de la vida. En el Club Re Pro, utilizamos esta metodología para fomentar el pensamiento crítico, la creatividad y el trabajo en equipo en nuestros participantes.

Estos son los cuatro pasos que seguimos:

  • Comprender el problema: En esta etapa, los participantes leen y entienden el problema, identificando los datos y la información relevante. Para ello, es necesario plantear preguntas como: ¿Qué se me pide?, ¿Qué datos tengo?, ¿Qué información necesito para resolver el problema?
  • Planificar: Aquí se buscan estrategias o caminos que permitan avanzar en la resolución del problema propuesto. Es importante que los participantes elijan una estrategia que les resulte más adecuada para su resolución. Para ello aprenden a hacerse preguntas como: ¿Qué estrategia matemática puedo utilizar?, ¿Existen problemas similares que haya resuelto anteriormente y que puedan ayudarme en este caso?
  • Ejecutar la planificación: En esta etapa, se pone en práctica la estrategia elegida para resolver el problema. Lo realizan de manera ordenada y controlada, prestando atención a los detalles y verificando que están siguiendo el camino correcto hacia la solución.
  • Revisar y comprobar: Una vez obtenida la respuesta, es importante revisarla y evaluarla para comprobar que es correcta y coherente con la pregunta del problema. Si la respuesta es incorrecta, es necesario volver a los pasos anteriores y reevaluar el problema, ajustar la estrategia o buscar un nuevo camino para encontrar la solución.

Siguiendo estos pasos, los niños pueden aprender a resolver problemas de manera efectiva y eficiente.

Aunque estos pasos se presentan en un orden lógico, no es necesario seguirlos en ese orden sucesivo. De hecho, en algunos casos puede ser útil volver atrás y revisar los pasos previos a medida que se avanza en el proceso de resolución del problema.

Por ejemplo, después de entender el problema, puede ser útil comenzar o desarrollar una estrategia para resolverlo. Sin embargo, a medida que se planifica, pueden surgir preguntas adicionales sobre el problema que requieren una comprensión más profunda del problema. En ese caso, puede ser necesario volver al primer paso para obtener una mejor comprensión del problema antes de continuar con la planificación.

Equipo académico.

El equipo académico del Club Re Pro está conformado por profesionales altamente capacitados y comprometidos con la educación de los niños y niñas que conforman nuestro Club.

Liderando nuestro equipo se encuentra Gabriela Gómez Pasquali, Directora Académica y de Innovación, quien trabaja en conjunto con el Coordinador Académico, Rodrigo Vásquez A., para asegurar que se cumplan los objetivos y metas establecidas para el aprendizaje de los participantes, y que se sigan los estándares educativos.

Contamos también con la colaboración internacional de Christian Reyes y Patricio Felmer Aichele, de la iniciativa ARPA del CIAE y del CMM de Chile, quienes aportan su experiencia y conocimientos en el área para enriquecer aún más la experiencia de aprendizaje de nuestros niños y niñas.

El equipo docente trabaja en estrecha colaboración para implementar las actividades y guiar a los participantes en la resolución de los problemas diarios, asegurándose de que se sientan motivados y desafiados, pero sin perder de vista la comprensión y el aprendizaje de los conceptos clave.

En el Club Re Pro de OMAPA, estamos comprometidos con brindar un ambiente de aprendizaje óptimo y enriquecedor para nuestros niños y niñas, y nuestro equipo de profesionales es la clave para lograrlo.

¿Cómo es cada sesión?

Cada sesión está estructurada y planeada, lo que se transforma en una guía para el tutor en el desarrollo de un tema específico. En el caso descrito, el plan de la sesión se enfoca en la resolución de un problema diario cuidadosamente seleccionado para el nivel correspondiente de los niños y niñas.

El proceso de selección de los problemas se ha realizado de manera minuciosa, para asegurarse de que cada uno sea un desafío interesante para los participantes, pero no tan difícil que resulte imposible de resolver. Además, se han previsto las diferentes interpretaciones que los participantes pueden darle al problema, con el fin de preparar las preguntas adecuadas que les permitan avanzar en su resolución.

Este enfoque en un problema diario permite a los participantes trabajar en habilidades como la resolución de problemas, la creatividad y la toma de decisiones. Al trabajar en un problema específico, los participantes pueden aplicar los conceptos aprendidos en el Club a una situación real y ver cómo se relacionan entre sí.

En resumen, un plan de clase cuidadosamente estructurado y enfocado en la resolución de un problema diario puede ser una herramienta efectiva para el aprendizaje y desarrollo de habilidades importantes en los participantes.

¡Súmate al Club Re Pro y transfórmate en un experto en la resolución de problemas!